Era como siempre, de pie frente a aquel roble de enormes proporciones,
esperando la llegada de su salvador.
Observó con algo de impaciencia su reloj; 11:45, faltaba nada para que
el año finalizara y otro nuevo comenzara. Decidió tomar asiento junto al
gigante que lo acompañaba y esperar un poco más.
Desde aquella montaña la vista que tenia de la ciudad era maravillosa,
las luces de series navideñas y uno que otro fuego artificial surcando el aire
le daba color a todo; en esas fechas siempre se sentía cálido el mundo,
¿entonces, porque decidió abandonar lo que tenía para convertirse en lo que
ahora era? Su reciente condición tampoco podría llamarse como la mejor, pero ya
no había vuelta atrás.
—¿Extrañando el mundo de allá abajo? —Kyuhyun giró la cabeza, molesto.
—Te he dicho que no me gusta que me leas la mente.
—Yo no leí nada, —se excusó Siwon, —pero verte con la mirada perdida
en ellos y su diversión me hizo deducirlo irremediablemente.
—Como sea… ¿Por qué tardaste tanto? —La impaciencia en su voz era
notable.
—Lo siento, mi padre estaba dándonos una plática espiritual muy
convincente, ¿quisieras escucharla?
—No, no me interesa.
—De acuerdo.
Siwon tomó asiento junto a Kyuhyun; pasando su brazo sobre los hombros
de este. Kyuhyun no se opuso ante tal gesto.
—Cinco, cuatro, tres, dos, uno… ¡Feliz año nuevo!
Una flor de color rojo saltó al cielo en ese momento, y en ese
instante Siwon besó con dulzura los labios de su novio.
—Feliz año nuevo… —Susurró en medio del beso, Kyuhyun sonrió.
Ambos se pusieron de pie y se fundieron en un
abrazo. Siwon desplegó sus alas y se elevó sobre la roca en la que habían
estado sentados. Le tendió la mano a Kyuhyun.
—¡Vamos! Vuela conmigo. —Le ánimo.
—No puedo… yo no tengo tus alas, ni las tendré.
—Si fueras un poco más amable y te dejaras guiar…
—Entonces tu padre me controlaría y ese no es mi
deseo. —Siwon sonrió.
—¿Y tú idea de ser un fantasma errante es mejor
que ser como yo?
Kyuhyun tronó la lengua y comenzó a alejarse del
lugar a paso rápido.
—Espera, Kyuhyun.
Siwon comenzó a seguirlo, volaba justo sobre él.
—¿Comenzamos el año peleando?
—No me jodas.
—Ese no es un lenguaje muy propio, mi amor.
—Jodete, bastardo alado.
Siwon se echó a reír con fuerza. Descendió un poco, hasta casi tocar el suelo
y sujeto de los brazos a Kyuhyun, con premura comenzó a levantarlo.
—¡Detente!
—¡No!
—¡Maldito!
Kyuhyun pataleaba y gritaba maldiciones cual niño
pequeño haciendo berrinche; sin embargo, Siwon seguía elevándose más. A Kyuhyun
le asustaba estar tan alto, llegó un momento en que dejo de moverse y su cuerpo
se tensó, cerró con fuerza los ojos y Siwon notó el cambio.
—No tengas miedo… —Comenzó. —¿Piensas que dejare
que caigas de nuevo? Una vez cometí el error de dejarte solo, y mira en lo que
te convertiste por eso.
—Yo… yo quiero ser como tú, pero también sé que
tu padre no aprueba lo nuestro.
—Claro que lo hace, ¿sabes porque? —Siwon no
esperó a que Kyuhyun respondiera, sabía que no lo haría así que respondió el
mismo—. Porque mi amor por ti no es carnal, lo que siento por ti es el amor más
puro y sincero que un ángel como yo puede sentir, y en dado caso que estuviera
mal, abandonaría mis alas y mi puesto para errar eternamente contigo…
—¿Me mantendrás sano y salvo?
—Lo estarás siempre que estemos juntos…
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También me gusta el WonKyu ._.(?)
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